Una de las víctimas mortales que dejó la tragedia en el puente de la calle 30, a la altura del Inem, fue Juan Bautista Caraballo Rivera, de 78 años, quien se desplazaba como todas las mañanas a trabajar en el mercado vendiendo comida.

En Medicina Legal, el hermano de Juan Bautista, Antonio Caraballo, señaló que la familia se enteró del hecho a raíz de un amigo que pasó por el lugar.

"Me enteré esta mañana por amigos que me llamaron para informarme. Un amigo me llamó cuando estaban levantando los cadáveres y reconoció a mi hermano, por lo que me llamó. Nos comunicamos con la familia para informarle lo que sabíamos", explicó Caraballo. 

Antonio recuerda a su hermano, quien vivía en el barrio Villa Adela, en Soledad, como “una persona trabajadora, siempre estuvo en el mercado, iba a esa hora a trabajar porque vendía comida”.

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Por su parte, el hijo de Juan Caraballo, Naldo Caraballo, lo destacó “como un excelente padre, le debo mucho por la crianza que nos dio. Estoy muy agradecido porque soy lo que soy, por él”.

Naldo, quien es mototaxista en Santo Tomás, señaló que cuando recibió la noticia “lamentablemente no sabía qué hacer, me llamó un tío”.

El hijo de Juan Bautista indicó que han escuchado muchas especulaciones con respecto al motivo del colapso del puente, sin embargo, hasta ahora no hay una versión definitiva sobre el incidente. 

Las otras víctimas mortales de este incidente son Joel Alfonso Merino Torregrosa, Israel Rodríguez Pereira y Omar Martínez Solís. Los heridos son Brenda Lizeth De Las Salas Jiménez, Fredy Manuel Lalinde y Luis Alfonso Llanos Ferrer.